En Almacenes Freigenedo encontrarás diferentes tipos de telas de punto y sudaderas para todos los gustos y usos. Con estas telas podrás confeccionar desde ropas infantiles, abrigos, chaquetas, mantas para adultos y bebés, sudaderas, pijamas y muchas otras prendas. Tenemos más de diez tipos de telas con diferentes tipos de punto para que elijas la que más cumpla con tus expectativas. Tenemos desde telas de punto más fino para temperaturas un poco altas, hasta los más gruesos para combatir el frío del invierno.
Las telas de punto jacquard jersey son tejidas con hilos de diferentes colores formando un estampado. Este tipo de punto es el indicado para la confección de cardigan y pañuelos. Aunque, también sirve para todo tipo de prenda o diseño.
Las telas de sudadera son telas de punto que se diferencia a las de jersey prácticamente solo por el peso. La tela de sudadera de verano suele pesar aproximadamente 250 gramos por metro cuadrado y la de invierno, unos 300 gramos. Estas últimas tienen una felpa corta para brindar calor, mientras que la de verano solamente tiene un pequeño rizo en la cara interior. Estas telas de punto son magníficas para el invierno, y para fabricar sudaderas, pantalones, chaquetas, gorros y hasta vestidos.
La tela de punto jersey es una tela elástica de menor gramaje que la de sudadera. Su peso máximo ronda los 220 gramos por metro cuadrado. Por lo general, su elasticidad se debe a un pequeño porcentaje de elastán. Como su nombre lo dice, las telas de punto jersey son las ideales para camisetas, bañadores, vestidos y todo tipo de prendas más cómodas
Las telas de punto tricot son aquellas lisas con costillas transversales y longitudinales. El tricot tiene un punto de urdimbre multibar. Este punto es muy usado en la lencería, vestidos y prendas femeninas, cuando es completo. Incluso se pueden hacer trajes de baño con este punto. Mientras que cuando el punto está a la mitad la urdimbre es de single bar. Generalmente, se utiliza en la confección de forros y lencería.
El enclavamiento es un punto reversible de costillas muy finas. Puede confundirse con el jersey de punto si esta tela no fuera igual por ambos lados. Además, estas telas de punto de enclavamiento suelen ser más gruesas, siendo casi el doble que las otras. El punto de enclavamiento es el más estable de todos los tejidos de punto. Esta y las demás características anteriores hacen que las telas hechas de este punto sean las idóneas para la alta costura. O sea, para la confección de trajes a la medida, ropa de diseñador, bordados, etc. Lo mismo para vestidos para mujeres como para prendas masculinas.
El doubleknit, o tejido de doble punto (por su traducción al español) es un tejido de punto bastante grueso y pesado. Al igual que el punto de enclavamiento, es igual por ambos lados de la tela. Además, se estira menos que los otros tejidos. El tejido de punto doubleknit es bastante esponjoso gracias a que se confecciona con dos agujas. Entre los materiales más utilizados para fabricar las telas de punto doubleknit están el algodón y la lana. Estos le brindan aún mayor volumen al tejido.
El poliéster es una fibra sintética formada por etilenglicol y tereftalato de dimetilo. Esta mezcla produce el polímero o poltericoletano. Como resultado de este proceso se obtiene la fibra, que en sus inicios fue la base para la elaboración de los hilos para coser. En la actualidad, es la fibra sintética más usada en la industria textil por su durabilidad y resistencia. Sin embargo, al ser una fibra sintética no es recomendable lavar las telas de punto hechas de este material a una temperatura mayor que 30 grados celsius o planchar a más de 150. Tampoco debe secar en secadoras. Esto se debe a que el poliéster no es muy resistente a altas temperaturas.
El algodón es una fibra natural especial para las telas de punto y para confeccionar cualquier tipo de prenda. Este material es un aislante natural de la temperatura, ya que absorbe la humedad y expulsa el calor. A diferencia del poliéster u otras fibras sintéticas, el algodón es resistente a altas temperaturas. Además, es un material hipoalergénico. Por lo tanto, es prácticamente imposible que le provoque una reacción alérgica a alguna persona.
La lana es un material elástico y resistente. Esto es lo que le permite a la lana estirarse en gran proporción sin romperse. Además, algo muy importante es que, luego de estirarse, dentro de ciertos límites, vuelve a su forma natural. Gracias a esta propiedad de recobramiento de la extensión, la lana tiene la habilidad de retener la forma de las vestimentas, y mantener la elasticidad de las alfombras. Las fibras naturales de la lana absorben la humedad de la atmósfera. De todos los materiales, la lana es la que lo realiza en mayor proporción. La lana es higroscópica, es decir que absorbe vapor de agua en una atmósfera húmeda y lo pierde en una seca. Otra de las propiedades de la lana es su elasticidad. Esta es la propiedad de las fibras de lana, por lo cual se pueden doblar con facilidad, sin quebrarse o romperse. Por si fuera poco, la lana presenta cierta resistencia a las bacterias y los hongos. Sin embargo, al ser una fibra natural, es una fuente de proteínas para los insectos. Por tanto, las telas de punto hechas de lana deben mantenerse limpias y bien protegidas de polillas y semejantes.
