Entre los tejidos más populares el de panamá es uno de los más preferidos, esto se debe a su suave tacto, poca elasticidad, capacidad para hacer cintas y además de poder utilizarse como cortinas o manteles gracias a sus propiedades impermeables.
El panamá es un tejido muy versátil que goza de tener lo mejor de un tejido natural y uno artificial. Su punto cruz resulta muy conveniente y su fabricación goza de ser más simple que la de otros tejidos, por lo que resulta rentable y apropiado para moda y decoración.
Si bien este tejido no bloquea por completo el paso de luz, sí admite bordados, estampados y cualquier otra forma de decoración y tejidos que complementan, esto gracias a que cuenta con dos tipos de presentaciones, el fino y medio; que va de la alta a la baja calidad respectivamente.
A continuación mostraremos los detalles que debes conocer sobre este tejido, sus variedades y características, así como también sus diferencias con otros tejidos similares y formas de mantener en el hogar o en las prendas, todo lo necesario para realizar la mejor elección posible en base a lo que podemos ofrecerte en nuestro stock.
Puede resultar gracioso el pensar cuando sería conveniente utilizar un tejido como el panamá, ya que este al ser tan versátil resulta casi en una opción universal en cuanto a decoración, también con interesantes aplicaciones para la confección de modas. Pero antes de abordar a detalle sobre las aplicaciones para este tipo de tejido es necesario comprender los formatos con los cuales esta tela se encuentra en el mercado.
El panamá fino (tal como su nombre indica) posee un trenzado más cerrado que garantiza más suavidad al tacto y suele utilizarse en prendas y decoraciones más delicadas, también en fundas y cortinas. Gracias al tipo de material (combinación de fibras de algodón con material sintético) y el tipo de punto cruz, estos tejidos no se deshilan si son recortados y pueden estirarse un poco, lo suficiente como para considerarse resistentes y adecuados para el uso cotidiano.
Este formato de panamá es más robusto, rígido y duradero. Resulta más apropiado para prendas tales como sombreros, camisas y pantalones, así como en cortinas, tapizados, manteles y forrados. Se trata de un punto cruz más amplio que permite el paso de la luz y del viento hasta cierto punto, por lo que también pueden ser útiles para estores. Tienen más acentuada su particularidad impermeable y resistencia a la suciedad.
En el mercado es posible encontrar gamas de este tejido que van del 100% algodón al 100% poliéster (o material sintético), por lo que se trata de una elección un tanto complicada en principio, especialmente porque entre más contenido de tejido natural posea la tela, su calidad y precio será mayor.
Saber cuál elegir dependerá del propósito, pero entre más sintético sea el tejido, será más fácil de mantener y duradero.
La limpieza de la tela de panamá dependerá de la cantidad de tejido natural que posea, ya que el tejido sintético de por sí suele ensuciarse poco, así como contener olores o polvo. En caso de que se trate de un tejido de buena calidad y con buen porcentaje de tejido natural entonces la limpieza preferiblemente deberá realizarse a mano, a menos que esta contenga alguna indicación en donde especifique que se admite el lavado en lavadora.
Aunque esta sea una tela robusta en comparación a otras, siempre será recomendable atender las zonas más afectadas por la suciedad y el polvo, o en caso de alguna limpieza completa, utilizar detergentes suaves y agua tibia por poco tiempo, eso para evitar decoloración o debilidad en el tejido.
Aunque se tenga buena parte de algodón en el tejido, el planchado y las altas temperaturas hacen que el tejido sufra graves daños y tienda a quebrarse, y puede facilitar la ignición en algunos casos, por lo que el secado deberá realizarse bajo el sol y con buena ventilación.
Este tipo de tejido no suele ser muy variado en cuanto a sus colores y texturas, por lo que suele ser una opción de refuerzo para otros que sí logran resaltar colores más vivos y texturas mucho más agradables al tacto.
Otra de las cosas destacables de la tela de panamá es que suele conocerse con el nombre de tela de esterilla, y de hecho, el nombre de esterilla suele ser mejor difundido que el de panamá, que ha sido más asociado a los sombreros que son fabricados con el mismo rústico material.
La tela de panamá con frecuencia suele ser comparada con la de tusor, esto porque ambas guardan mucha similitud cuando se trata de tejidos mayormente de material natural, funcionando bien como forros y fundas para muebles y diferentes decoraciones para el hogar.
A saber, el tusor guarda otro tipo de método de fabricación así como de punto cruz, por lo que sus texturas varían ligeramente al igual que sus precios, y que el tusor suele encontrarse en color crudo de forma comercial.
Los sombreros de panamá no son originarios del país con el mismo nombre, pero su impacto se hizo tal que forma parte de los símbolos con los cuales suelen ser asociados los panameños, algo que podría partir de la casualidad.
Es difícil saber con exactitud sobre el origen del tejido de panamá, aunque se tiene certeza de que pertenece a estos últimos siglos, y ha sido así gracias a los tipos de materiales y métodos de fabricación que este tipo de tejido puede obtenerse.
Gracias a que se originó para atender las necesidades de un mercado que requería de tejidos más duraderos y con mejor tecnología, este se ha popularizado hasta el punto de poderse encontrar en combinaciones de diferentes materiales aparte de sus ya conocidos (algodón y poliéster), mejorando sus posibilidades en cuanto a diseños y texturas.
